18va. fecha, Copa Competencia, 4ta. categorí­a

Menor y Mayor hizo historia

Liniers B y el conjunto puntaltense se cruzaron en un partido caliente, ya que si el Chivo empataba o ganaba pasaba a jugar por el campeonato, pero la visita sacó todo el amor propio y lo dió vuelta.

Textos: Julián Ponte Fotos: Horacio Contreras

En la definicion de la última plaza para jugar el reducido por la Copa Competencia Liniers B se quedó con las manos vacías ante la sorpresa del torneo de cuarta división, Menor y Mayor. El Chivo venia cuarto, un punto arriba del conjuto puntaltense, que terminó dando vuelta el marcador para imponerse por 2 a 1.

Fue un primer tiempo muy intenso, parecía un partido de ajedrez, ya que ambos equipos estaban más enfocados en neutralizar al rival y no en tratar de meter la pelota entre los tres palos. Tan es así que la única llegada clara de la primera etapa fue el gol del conjunto local, luego que Franco Castiglia se escapara por la izquierda, llegara hasta el fondo y envíe un centro que el defensor de M y M no pudo despejarla. Y alli estaba Joaquín Goicochea para aprovechar el infortunio del central y empujar la pelota al arco.

Ya en la segunda etapa se vería otra versión del conjunto de Punta Alta, debido a que salió decidido a atacar y a ganar el partido. Y tuvo mucho resultado ese cambio de actitud, ya que lo pudo dar vuelta nomás.

La primer llegada fue para el conjunto visitante con una excelente jugada personal de Enzo López, quien dejó atrás a dos defensores y ejecutó un centro atras, en el camino la impactó Rodrigo Bargas, pero su remate salió débil a las manos del arquero local. Avisaba Menor y Mayor.

Minutos mas tarde Liniers tendría un tiro libre que ejecutó Franco Ojeda desde el vértice derecho del área. El remate fue muy bueno, aunque mejor resultó la tapada de Facundo Esquivel, quien voló y logró despejar la pelota al córner. El arquero seriía pieza clave del resultado, no solo por sus intervenciones sino porque a los 30 minutos fue el encargado de ejecutar un penal que cambió por gol. De esa manera empardó el partido en uno.

Y cuando parecía que se terminaba la ilusión de la doble M, llegaría la salvación de Luciano Ríos, quien había ingresado en el inicio del complemento. Aprovechó que la defensa del Chivo no pudo despejar la pelota luego de un córner, se encontró con la pelota picando en el área y la pateó con lo último de su fuerza. Asi marcó y desató la locura tanto suya como la de sus compañeros, cuerpo técnico e hinchas que se llegaron a Bahía. Tal fue la euforia que cuando festejó el gol, se sacó la camiseta, y una vez que terminó la algarabia por el gol el árbitro le mostró la tarjeta amarilla, y en su alegría incontenible abrazó al referi. Un dato de color para un final colorido.

El dato

Menor y Mayor es un club de reciente aparición y ya esta dando qué hablar, En la cuarta categoría logró meterse entre los cuatro de arriba, derrotando a Liniers ni mas ni menos que en el Zibecchi.

No te pierdas los goles ni el festejo de los chicos de Menor y Mayor...